-Eres-

Eres como
La última gota de leche que siempre se va por el desagüe

La nota final de la canción que nunca quiero oír acabar


La pata coja de una silla en mitad de un examen


La tarde tormentosa que arruina mis planes


La piedra en mi zapato


La esquina del armario con el que me tropiezo cada noche


La mirada reprochadora


El cristal de mis gafas empañado


Abrir la nevera y no encontrar nada


Tener mucho sueño y no quedarse dormido


Una tarde de sábado sin nada que hacer


La pintura de uñas cuando se cae a cachos


La última foto en un álbum


El último día de vacaciones


Un portazo cuando hay corriente


La única canción de Jorge Drexler que no me gusta


El final de un concierto de Iván Ferreiro


Cuando la luna llena empieza a menguar


Cuando salgo a la calle y hay bochorno


Mis playeros rotos


Las sábanas enroscadas a mis pies


La radio cuando no se oye


El gol de Iniesta que no llegaba en el Barça-Chelsea


La mano que toca mi espalda cuando escucho mi mp3


Los vecinos que hacen obras un domingo por la mañana


Cuando no me funciona Google



Eres un fastidio. No puedo contigo. Y sin ti, tampoco.

Hoy

Y saber que hoy aún no ha terminado, que todavía hay esperanza, que no todo está perdido. Que cada gota de lluvia que hoy cae por mi ventana puede verse perforada por un rayo de sol que la destruya desde el centro, transformándola en colores brillantes que iluminen la oscuridad que desde hace meses acecha mi existencia.

Gotas que al morir caerán sobre mi rostro despertándolo del letargo en el que llevaba tanto tiempo sumido que casi hasta había olvidado cómo respirar.

Y dejando a su paso inertes cadáveres de gotas difuntas, el sol se encontrará con mi fuerza renovada y nos fundiremos en una lucha en la que su calor y mi potencia darán lugar a una energía sin límites, una aurora boreal tan espléndida que ni siquiera los ojos de los que habitan el círculo polar ártico la habrán contemplado igual.

Oxígeno, hidrógeno y nitrógeno desaparecerán dando paso a inusuales combinaciones de azules y violetas, y todos alzarán la vista al cielo. Incluido tú. Entendiendo en un instante la naturaleza de lo nuestro.