La soga

Lo que no me dicen tus labios,
me lo dicen tus ojos
cuando callas bruscamente
y me miras con recelo.

Lo que no me dicen tus ojos,
me lo dicen tus manos
cuando mueves, furiosa,
una servilleta entre los dedos.

Lo que me oculta tu sonrisa
me lo dicen tus abrazos
que me rodean como la soga
del suicida más certero.

Lo que no me dicen tus manos,
me lo cuenta tu silencio
escapando entre resquicios
de una boca congelada.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

oOoOoOhhhhhhhh Ana!!

cada día nos sorprendes con algo diferente y lo mejor es k sigue siendo igual de bueno!!

genial!!

Luna Méndez dijo...

jajajaj ay lau..tú que me ves con buenos ojos..xD

Noviembre dijo...

No solo ella te ve con buenos ojos... :D

Tíiiiia, que también le das a la poesía! :P


Ahora en serio, te ha quedado preciosa, de verdad!! (y eh, manosmanosmanos)

Muaaak